Enrique Peña Nieto, presidente electo, envió un mensaje de solidaridad a los campesinos del país, a través de Jorge Carlos Ramírez Marín quien estuvo en su representación en el Consejo Político y de Desarrollo Rural de la Confederación Nacional Campesina, pues se requiere que la gente del campo recupere la confianza en la responsabilidad del gobierno federal, de entrar en su ayuda, no solamente en acciones policiales y militares, sino fundamentalmente en acciones que detonen la producción y resuelvan el grave problema de la pobreza.
Lo que el Presidente pidió que les transmitieramos, es que no dejen de creer, de estar conscientes en la enorme importancia que tiene la tarea que van a realizar los próximos seis años.
Es importante vincular la tarea del rescate del campo mexicano y su transformación, con la tarea de devolver paz y tranquilidad al territorio mexicano.
Nos reunimos en el salón de usos múltiples “Emiliano Zapata” de la CNC y ante legisladores y líderes campesinos de toda la República, el enviado de Enrique Peña Nieto manifestó que el deseo del Presidente es que ustedes sepamos que tiene toda la confianza en el papel que jugará la Confederación Nacional Campesina en los próximos seis años, para lograr los objetivos que, como país, nos estamos trazando.
Ramírez Marín nos informó que se está en la recta final de preparar lo que será el próximo Plan Nacional de Desarrollo, ya que se hacen los últimos ajustes de lo que será la estrategia que el Presidente le propondrá al país para hacer del próximo sexenio, seis años de progreso para México.
Celebramos que los campesinos cenecistas se pongan al día y al tiempo;e es fundamental mantener el espíritu de cambio y de modernización, que actualicen su agenda legislativa y destacó que el papel del gobierno federal es no abandonar la responsabilidad que se tiene con el sector agropecuario mexicano.
El campo es un tema de seguridad nacional, no solamente de producción. Entonces nos referimos a los 400 mil migrantes que cada año son devueltos por Estados Unidos, de los más de 140 mil centroamericanos que utilizan a México como vía para llegar a la otra parte de su esperanza.
Son nuestras zonas rurales las que se ven más afectadas. De ahí que la estrategia del nuevo Gobierno es que los hombres que pueden echar a andar maquinarias agrícolas y convertir a los campos en zonas productivas; convertir ciudades hoy casi fantasmales en zonas prósperas donde haya escuelas y oportunidades. Esa es la responsabilidad del gobierno federal y en eso hay una palabra que flota en el ambiente: esa palabra es confianza.
Confianza de la gente hacia el gobierno federal y del gobierno federal en productores que sólo están esperando eso: que se les vuelva a tener confianza para darles crédito, no solamente a los grandes empresarios, sino a ellos, micro-empresarios del campo, que esperan que se les vuelva a tener confianza para que ya no se les cobre doble comisión en los créditos. Y se les vuelva a tener confianza para que no se politicen las entregas de apoyos, según el gobierno o el signo partidista de cada entidad.
Para que el gobierno acuda a sus organizaciones a preguntarles cuáles son los mejores planes que podemos llevar a cabo. Ese será el signo del próximo gobierno federal.
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