En la Confederación Nacional Campesina expusimos que la alimentación en México es el problema socioeconómico más importante que tiene el país y que debe atenderse lo más pronto posible, a través de una Red Nacional de Promotores de la Seguridad y Soberanía Alimentaria.
La propuesta fue hecha por el diputado Alberto Jiménez Merino Secretario de Seguridad y Soberanía alimentaria de la CNC, quien explicó que la red debe tener representaciones territoriales en municipios, regiones y estados del país, impulsando políticas, programas, proyectos y acciones que ayuden a personas en su abasto de alimentos diarios, logrando capacidad de compra y auto producción.
En la actualidad 28 millones de mexicanos se encuentran en condiciones de pobreza alimentaria, y más de 40 millones tienen algún grado de problemas como desnutrición, obesidad y sobrepeso, situación que se agrava con el cambio climático que ha generado sequías, heladas e inundaciones afectando a 19 estados, 1213 municipios y 8 millones de personas, por lo que se ha dejado de cosechar 4 millones de toneladas de maíz y 400 mil de frijol.
Esta situación se agrava por la intensa sequía que afecta a los Estados Unidos lo que ha provocado un encarecimiento del maíz en el mundo, lo que en México repercutirá en otros granos como el trigo, por lo que en los próximos meses se esperan aumentos de precios hasta del 30 por ciento en los básicos y otros alimentos, principalmente el pan, tortilla y carne.
Su propuesta capacitará y brindará asistencia técnica mínima que asegure el autoconsumo, apoyando así a mexicanos que cuentan con pequeños espacios tecnificados, huertos y granjas; incorporando contenidos, materias, carreras técnicas y de nivel superior en escuelas regionales, conformadas por un Consejo Técnico con líderes, productores e instituciones educativas y de investigación.
La red pretende ser una instancia organizativa, líder en la promoción de la seguridad y soberanía alimentaria de los mexicanos a través de los proyectos y acciones que se pongan en la mesa, integrando información, coordinando los esfuerzos, gestionando recursos que encaminen la seguridad alimentaria en comunidades rurales y zonas urbanas del país.
Ante la falta de comida y la desorientación en los hábitos alimenticios al no saber qué y cuánto comer, estamos invadidos de productos chatarra que nos ha dominado; por lo que hay que identificar las opciones alimenticias, las posibilidades productivas y de abasto local, mejorando la nutrición de los mexicanos que beneficien y reviertan el paso de mercancías e importaciones.
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