CUESTA DE ENERO ENCARECE ALIMENTOS HASTA 50 POR CIENTO

En la Confederación Nacional Campesina denunciamos que el precio de la tortilla se generaliza a 16 pesos el kilo en el país, en tanto que el kilogramo de frijol amenaza con subir hasta 40 pesos, lo que, junto con otros productos básicos, confirma que la carestía de la cuesta de enero llega al 50 por ciento con relación a los últimos meses del año pasado.

El abandono crónico del campo durante la actual administración panista, lo que se traduce en escasez y encarecimiento de los productos de consumo básico, es uno de los motivos de la marcha nacional del próximo martes 31 de enero del Ángel de la Independencia al Zócalo de la capital del país, en la que participará la central junto con la Unión Nacional de Trabajadores y organizaciones ciudadanas.

La manifestación es una convocatoria del Movimiento por la Soberanía Alimentaria y Energética, los Derechos de los Trabajadores y las Libertades Democráticas, que por sexta vez en el sexenio protesta contra el gobierno de derecha que sólo ha empobrecido a la mayoría de los mexicanos.

Reitero la alianza de la central con las organizaciones sindicales y ciudadanas del país, que se pronuncian por un Programa Alimentario de Emergencia y advierten sobre una grave crisis social y política en México en caso de no cambiar el rumbo económico nacional.

La responsabilidad del actual gobierno en esta situación de crisis y emergencia es insoslayable. Repruebo que el presidente Felipe Calderón Hinojosa haya vetado el Decreto Legislativo que disponía aplicar 10 mil millones de pesos en ayuda para los productores afectados por las contingencias climáticas, bajo el argumento de que no disponía de esos recursos, y ahora anuncie que aplicará 34 mil millones de pesos, por lo que, existe la sospecha de que les vaya a dar uso electorero cuando todas las encuestas dicen que el Partido Acción Nacional (PAN) perderá este año el poder.
Lo anterior obedece a que durante la presente administración los índices de pobreza y desigualdad se han incrementado, debido a la persistencia de una política económica que sacrifica el desarrollo del mercado interno, promueve la dependencia del exterior y multiplica el desempleo.

El empobrecimiento de las familias campesinas, los cada vez más caros alimentos básicos y los brotes de hambruna en el país, son parte de un panorama desolador que agudiza la pérdida de soberanía alimentaria y deja sin cumplir el derecho  a la alimentación establecido en el artículo cuarto de la Constitución y la fracción XX del artículo 27 constitucional, lo que obliga a declarar al país en estado de Emergencia Nacional Alimentaria.

Me pronuncio por instalar una Mesa de Diálogo y Concertación entre el Congreso de la Unión y las organizaciones campesinas para construir el Programa Alimentario Emergente con el Poder Ejecutivo, a través de las secretarías de Gobernación, Agricultura, Desarrollo Social y Hacienda.

Esperando sus amables comentarios les deseo un excelente inicio de semana para todos. Saludos!

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