La miopía del actual gobierno ha colocado al sector rural mexicano al punto del colapso, pues la falta de apoyos ante las sequías, heladas y huracanes, entre otras contingencias climatológicas, tienen al agro en el filo de la navaja.
En consecuencia, estamos al borde de una crisis alimentaria, lo que significa que no tendremos la tradicional producción de bienes básicos que abastezcan la demanda de bienes de consumo popular a la población y cada vez más la seguridad y soberanía alimentaria se alejan como objetivos de Estado.
Acudí hoy a Anenecuilco, la tierra que vio nacer a Emiliano Zapata en 1879, y donde tomó posesión como presidente de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos en Morelos, mi compañero y también diputado federal Félix Rodríguez Sosa.
Ahí tuve la oportunidad de manifestar mi preocupación porque los productores afectados en el país por el cambo climático, que son decenas de miles, no tendrán liquidez necesaria para resarcir sus pérdidas económicas y poder reactivar sus resiembras.
Pero un problema igual de grave es que la baja oferta alimentaria generará un crecimiento desmesurado en los precios de los bienes básicos y por si fuera poco, recurrir a las importaciones será cada vez más difícil por la disminución de inventarios, ya que los productos que demandamos como maíz, arroz, trigo, soya, entre otros, los países con quien comercializamos los salvaguardan.
En otras palabras, más carestía, cuando el kilo de la tortilla rebasa ya en algunas zonas los 18 pesos el kilo, casi 300 por ciento más al precio que tenía cuando inició la actual administración panista. Lo peor, agregó, es que sucede lo mismo con la carne, con el huevo y otros productos básicos, al grado de que hasta la leche que se distribuye a los pobres acaba de aumentar 50 centavos el litro.
Ante estas condiciones adversas los diputados del sector agrario enmendamos la plana al Ejecutivo Federal, al incrementar en más de 45 mil millones de pesos el Programa Especial Concurrente 2012 (PEC), que es el que contiene el presupuesto rural para demostrar que también desde el Congreso se gobierna.
Somos un poder actuante, proactivo. El campo tendrá un presupuesto de más de 305 mil millones de pesos con él se podrán aligerar muchas carencias que perviven en nuestro sector agropecuario.
No es el PEC que se hubiera querido y se desatendieron renglones importantes para fortalecer la vida productiva del campo, de forma tal que fueron disminuidos renglones como el programa alimentario, activos productivos, las garantías que el Estado aporta para facilitar el acceso al crédito, el programa de sanidades y se excluyó el programa de competitividad de las ramas de producción, entre otros.
Ya son 22 los estados afectados gravemente por la sequía y que por eso los representantes cenecistas en San Lázaro han presentado en la Cámara de Diputados un segundo decreto legislativo por 10 mil millones de pesos, el primero fue por 5 mil millones de pesos a principios de año, para enfrentar esta tragedia que suma ya casi un millón de hectáreas perdidas y 1 millón 700 mil cabezas de ganado muertas.
0 comentarios:
Publicar un comentario